La televisión estatal de China, CCTV, celebró este sábado la final de su segundo concurso de español para poner a prueba el dominio de la lengua de Cervantes entre los estudiantes chinos de este idioma, cada vez más popular.
Una popularidad aún más visible desde que la CCTV, con 20 canales nacionales e internacionales, decidió realizar un concurso hace dos años y repetirlo de nuevo en 2015, a cuya final llegaron hoy seis jóvenes, cinco chicas y un chico, con al menos varios años atrás de aprendizaje de español a sus espaldas.
Du Nanxi, Wang Junyi, Zou Le, Li Suangqing, Zhang Tianci y Lin Yuehao, el único caballero, comenzaron probando al público y al jurado sus conocimientos del país hispanohablante que les había sido otorgado, teniendo que deslumbrar al “respetable” no sólo por su destreza gramatical, sino también por sus nociones culturales.
El tango argentino, las hormigas “culonas” colombianas, el “chifa” en Perú (término para referirse a la cocina adaptada al paladar originaria de inmigrantes chinos), los vinos chilenos, el “tapeo” español o los tacos mexicanos fueron destacados por los entusiasmados y jóvenes concursantes, de entre 19 y 23 años.
“¡A vivir que son dos días!”, proclamaba la joven Wang al hablar de las exquisiteces colombianas: “barriga llena, corazón contento”, decía sonriente sin olvidar citar al maestro de las letras de Colombia, el escritor Gabriel García Márquez.
Tras representar una escena teatral por parejas, desde diálogos amorosos con tintes tragicómicos a un pasaje de Don Quijote de la Mancha, sólo tres concursantes fueron “salvados” por el jurado, formado por la directora del Instituto Cervantes de Pekín, Inma González, el embajador de México en China, Julián Ventura, y el catedrático hispanista Zhao Zhenjiang.
En la prueba final las tres elegidas contaron con cinco minutos cada una para contestar a preguntas improvisadas por un jurado popular tanto en español como en mandarín, entre ellas el sobrenombre del autor del famoso hidalgo Don Quijote de la Mancha.
“El manco de Lepanto”, respondió con desparpajo Du, quien antes había interpretado al personaje de Cervantes, y finalizó su atropellada alocución con un aplaudido: “ya no sé ni lo que estoy diciendo”.
Su espontaneidad acabó siendo premiada por el jurado, que aupó a esta fan de Madonna, cuya canción “La isla bonita” le despertó por primera vez el interés de aprender a español, como ganadora del concurso.
“Me ha sorprendido, no puedo hablar un español tan bueno. Pero cuando estoy en el escenario creo que las luces brillantes me han ayudado mucho”, dijo a Efe la joven de 21 años, profesora de español en Xian (noroeste), al acabar el concurso.
Aun estudiando un máster para perfeccionar el idioma, Du aseguró que “no esperaba mucho del concurso”, y que uno de los principales motivos que le llevaron a aprender español fue, “por ejemplo, la gente… (Los hispanohablantes) son como yo, alegres, abiertos, así podemos comunicarnos bien”.
“A través de esta manera -continuó- he conocido muchas culturas y (he hecho) muchos amigos muy buenos de países hispanohablantes”.
Con vocación de actriz o presentadora, “de cualquier puesto siempre que sea con el público y pueda estar en el escenario”, dice, la joven había participado ya hace dos años en el concurso, cuando se estrenó, pero entonces “no tuve la oportunidad de pasar a la final”, apunta a Efe.
“Durante estos años siempre me digo, voy a entrar otra vez, porque es un escenario muy importante para mí, para expresarme y compartir mis experiencias con los demás en este país”, dice, y agrega: “estudié antes y siempre me dije: lo que será, será”.
Y fue un primer premio que le invitará a pasar tres semanas realizando un curso sobre cultura, ocio y turismo español en la Escuela de Organización Industrial (EOI) de España, que realiza esta institución en colaboración con el Instituto Cervantes, y a vivir en un colegio mayor de Madrid.
Licenciada en filología hispánica, la galardonada había subrayado durante el concurso que una de las grandes influencias de la cultura hispanohablante en China se puede ver en la obra del escritor Mo Yan, ganador del Nobel de Literatura en 2012 y a quien se considera el “heredero” chino del realismo mágico de García Márquez.
Según el Instituto Cervantes, en 2013 entre 2.000 y 3.000 estudiantes chinos terminaron los estudios universitarios de español en el gigante asiático, un número que, afirman en un comunicado, “no deja de aumentar cada año”.
El centro afirma que la segunda lengua más hablada del mundo “está de moda en China”, como prueba el concurso consagrado al español de la cadena nacional.
Fuente: latribuna.hn